Los hermanos Federico Segundo y Jesús Abengoza fundaron en 2001 Citraben, un negocio de transporte de líquidos alimentarios que empezó con una flota de tres camiones. Veinte años después y coincidiendo con la incorporación de Javier Abengoza, hijo de uno de los fundadores, la compañía ha experimentado un crecimiento exponencial gracias a la organización de los procesos empresariales. Una apuesta por la profesionalización sin perder la esencia de una empresa familiar que defiende la honestidad como principal valor.
Javier Abengoza era un niño cuando se subió por primera vez a un camión para acompañar a su padre en las rutas que hacía diariamente para transportar productos alimentarios entre ciudades de la geografía española. Aquel niño tiene ahora 35 años y encarna la tercera generación de una familia de transportistas en el epicentro de La Mancha.
Los empresarios nos dan sus opiniones acerca de la intervención de TACTIO:
Tactio nos abrió los ojos; ha sido una revolución, un cambio hacia la profesionalización.
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